martes, 25 de junio de 2013

Una argentina fuera de Argentina

¡Uffff, tantas cosas para contar que me llevaría un año escribirlo todo acá! Pero bueno, ¡tampoco para tanto, che!
¿Por dónde empezar? Bueno, sí, desde el principio, desde como partí de la tierra del asado y el vino, para llegar a la tierra de la cerveza y los trajecitos tiroleses, acá se los llama: Lederhose para los hombres y Dirndl para las chicas (¡Son tan lindos!, me siento una Heidi cada vez que lo uso).

Bueno, la cosa empezó por el año 2010, cuando conocí a mi marido en la Oktoberfest, o fiesta de la cerveza, en Villa General Belgrano, Córdoba, Argentina. Por esas casualidades de la vida, fuimos a parar al mismo hotel y, ¡plop!, el amor surgió desde un primer momento. No me pregunten por qué, pero siempre renegué bastante del estereotipo del macho argentino, o al menos porteño, entonces siempre me dije que iba a terminar con un extranjero. Me encantaba pensar en esa mezcla de culturas que se iba a dar, el descubrir cosas nuevas y bla bla bla. Miren si no tendré algo de bruja, o de cul...o, que fui a parar con lo que siempre quise en mi vida, un chico de otro país, un alemán. Pobrecita, no sabía en lo que me metía, jajaja.

Exactamente hoy, hace 1 año y un mes que vivo en Alemania. Y les digo la verdad, me encanta. Mucho. Muchísimo. Estoy super feliz de vivir en un lugar tan tranquilo, seguro y sano. No lo cambio por nada.
Para los chusmas que se preguntan cómo es Alemania, que si es verdad que la gente es fría, que cada uno vive en su mundo, que si son discriminadores o cuantas cosas mas quieran saber, acá les cuento: todo lo que tienen en mente, bórrenlo, no es nada que ver a lo que piensan. Saben que la primera vez que vine a Europa, fue con Christian, en ese tiempo estábamos de novios, y él me invitó para conocer su país, sus costumbres y a la familia; ok, volviendo a lo anterior, horas previas a embarcar el vuelo, le dije a Chris: "hagamos un juego. Yo voy a dibujar y a escribir todo lo que creo que es Alemania en una hoja de papel y lo voy a guardar y, un día antes de regresar a Buenos Aires, lo voy a abrir y voy a ver si algo de lo que tenía en mente cambió." Para mi gran sorpresa, me quería morir con todo lo que había dibujado, es más, ¡hasta me daba vergüenza!. Los alemanes, en general, son seres muy pero muuuuuuy respetuosos y super trabajadores, si hacés bien tu parte, todo va a ir como viento en popa, pero en la primera que hagas mal, ¡agarrate!. En fin, volví de mi actual hogar con pensamientos renovados y 8 kilos de más, ¡bueeeeeeeno, che!, ya sé, me comí todo, es que la respotería en Alemania es para morirse. Después voy a ir subiendo fotos de todo, voy a contarles y a mostrarles cosas buenas y no tan buenas de este hermoso país


Quiero decirles algo, empecé este blog para contarles mis experiencias vividas y por vivir. Se que hay mucha gente que está pasando una situación similar a la mía (pobrecitos de ellos, jaja), o que tan solo le gusta divagar con su mente por países donde nunca estuvo, pero se los imagina y se pone feliz, con una sonrisa en la cara. Espero poder acercarles todo tipo de situaciones, aromas y texturas para que sientan que están en Baviera, desde cualquier parte del mundo. ¡Ah, me olvidaba! Soy muy burra para la tecnología y estoy aprendiendo a usar el blog. Espero, en mi próxima entrada, agregar fotos y demás adornitos para que quede bien lindo. Les dejo un beso y ¡hasta pronto! o Bis Bald!